A Josep Guixà

 

Puertas, ventanas abiertas de par en par,

dentro  de espacios llenos de misterios ventilados por la soledad mas absoluta.

Paredes, realidad viva y orgánica donde estar puede ser irreal.

Gira el aire envolviendo e impregnándose de los olores de las paredes vulnerables y frágiles.

Texturas que no quieren ser ignoradas hacen que me abandone en la sobremesa en las

casas en ruinas y habitadas por el silencio vacío.

Vivencias aireadas como frutos de la memoria se acumulan en las cenefas y

esgrafiados volteados al infinito

Realidades que arañan las sombras y el tiempo que las limitan.

Las casas no nos pertenecen los olores si.

LAURA